En el Día Internacional de la acción por la salud de las mujeres, repasamos las principales medidas que contribuyen a prevenir los cánceres que se presentan con mayor frecuencia, o a detectarlos precozmente.
El cáncer de mama es el tumor más frecuente en las mujeres: según el Instituto Nacional del Cáncer de Argentina, se diagnostican alrededor de 22.000 casos por año y se producen más de 5000 fallecimientos por esta causa. Si bien se registran casos a edades más tempranas, el cáncer de mama se presenta con mayor frecuencia en mujeres a partir de los 45-50 años.
De acuerdo a la evidencia científica acumulada, algunos hábitos saludables que pueden contribuir a reducir el riesgo de desarrollar esta enfermedad son:
- Alimentación equilibrada: reducir el consumo de grasas de origen animal y sumar frutas y verduras
- Limitar el consumo de alcohol o evitarlo por completo
- Realizar actividad física regular: al menos 30 minutos al día, todos los días
- Mantener un peso saludable
Estas medidas también se recomiendan para contribuir a evitar otros tipos de cáncer y, en general, para enfermedades crónicas no transmisibles. No obstante, es importante saber que no todo depende del cuidado. El cáncer de mama es difícil de prevenir, ya que en su desarrollo intervienen también factores ambientales y genéticos; algunos de los cuales aún se desconocen. Por tal motivo, cobra importancia su detección precoz, que aumenta las chances de curación.
La principal herramienta es la mamografía, recomendada a partir de los 40, cada uno o dos años. También son útiles, sobre todo para las mujeres fuera de ese rango etario, el examen clínico mamario, que realizan profesionales de la salud en consultorio, o la ecografía mamaria. La resonancia magnética mamaria se ha sumado en los últimos años en situaciones particulares, para mayor precisión diagnóstica en población con riesgo aumentado por antecedentes familiares o por presentar mamas densas, entre otras circunstancias.
En Córdoba, estas técnicas están disponibles en el sistema de salud, tanto en el sector público como en el privado. También se cuenta con instituciones adecuadas y profesionales capacitados para su diagnóstico y tratamiento (cirugía, quimioterapia, radioterapia).
En relación al cáncer de cuello de útero, es preciso recordar que esta enfermedad está asociada al Virus del Papiloma Humano, una de las infecciones de transmisión sexual más comunes en el mundo. Por eso, en su prevención es clave el uso del preservativo. En Argentina, también contamos con la vacunación contra el VPH, que se aplica a niñas y niños a los 11 años. Para detectarlo precozmente, se recomienda la realización del PAP con colposcopía y/o del test de VPH. Podés conocer más información al respecto haciendo click aquí.
En relación al cáncer de ovario, hasta ahora, no se ha encontrado una conducta o práctica que permita su prevención, por ello es importante consultar sin demora ante síntomas como hinchazón abdominal, sensación constante de tener que orinar, sangrado intermenstrual, o pérdida de peso sin motivo aparente. Para saber más al respecto, te invitamos a leer esta nota.
Es necesario considerar también la prevención del cáncer de colon. Si bien es una enfermedad que no suele estar en primer plano cuando se habla de salud de las mujeres porque afecta a ambos sexos, es el segundo cáncer más frecuente también entre la población femenina. En este caso, los estudios indicados son el test de sangre oculta en materia fecal y la colonoscopía. Conocé más sobre cuándo realizarte esos estudios en este enlace.
Otras recomendaciones
Adicionalmente, hay que recordar las recomendaciones para el cuidado de la piel frente a las radiaciones solares nocivas: no exponerse al sol entre las 10:00 y las 16:00 y usar protectores de factor 30 o superior renovándolo según las indicaciones del fabricante. Es esencial seguir estas pautas de forma estricta en la infancia y tener en cuenta que el daño es acumulativo, por lo cual se deben sostener los cuidados durante toda la vida. Para saber qué rol juega el control de los lunares y a qué características hay que prestar atención, consultá aquí.
Por otra parte, es importante mencionar que además de la vacuna contra el VPH, hay otras que también contribuyen a prevenir el cáncer, o evitar complicaciones en caso de que haya un diagnóstico y se requiera hacer un tratamiento. Aprendé más sobre cáncer y vacunas, en esta nota.
Finalmente, es necesario insistir en la relación entre el hábito de fumar y el cáncer de pulmón, que también tiene una alta incidencia y mortalidad entre las mujeres.
Con la colaboración de la Dra. Juliana Mandrile.