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febrero 9, 2025
Cáncer de pulmón: dejar de fumar sigue siendo la mejor recomendación para evitarlo

El consumo de tabaco es el factor de riesgo más importante para desarrollar un cáncer de pulmón: cerca del 80% de los casos están asociados al hábito de fumar, aún cuando sean pocos cigarrillos al día. Hay otros factores que también pueden incidir, entre los cuales podemos mencionar la exposición al humo de tabaco ajeno aunque no se fume, la exposición al gas radón, al asbesto, a productos de la combustión del diésel o la polución del aire. No obstante, no es común que una persona que nunca fumó desarrolle esta enfermedad, por eso, la principal recomendación sigue siendo abandonar este hábito. Existen programas públicos y privados que ofrecen ayuda para hacerlo.

En Córdoba, de acuerdo al trabajo conjunto realizado con el Registro Provincial de Tumores, se observa un descenso en la incidencia de este tipo de cáncer entre 2004 y 2022. La literatura sugiere que esta disminución se relaciona con diagnósticos oportunos y campañas antitabaco. Pero se debe tener presente que, según datos del Instituto Nacional del Cáncer, el cáncer de pulmón es el tercero más frecuente en incidencia en el país, considerando ambos sexos; el primero en mortalidad en varones y el segundo en mujeres, con lo cual es necesario sostener y profundizar esas acciones, y mejorar el acceso al diagnóstico y tratamiento.

Hay dos tipos principales de cáncer de pulmón: el de células pequeñas y el de células no pequeñas. Este último representa alrededor del 80 por ciento de los casos. Ante un diagnóstico de cáncer de pulmón, será importante la biopsia y la estadificación que realice el equipo de salud, para decidir el camino a seguir.

 

Detección precoz

Como en casi cualquier tipo de cáncer, la detección precoz mejora las chances de éxito de los tratamientos. No obstante, es preciso aclarar que hacerse radiografías de tórax de rutina no es eficaz como método de “screening” o tamizaje, dado que en estudios con gran cantidad de pacientes no se ha podido demostrar que las personas que accedían a este método lograran sobrevivir por más tiempo.

Hay un creciente consenso en relación a la utilidad que pueden tener las tomografías de tórax de bajas dosis en personas con mayor riesgo de desarrollar cáncer de pulmón, por sus antecedentes de tabaquismo. Es importante conversar con su médico/a de cabecera para evaluar si es necesario que, en cada caso individual, pueda ser beneficioso hacer este estudio. Cabe recordar que el cáncer de pulmón se presenta con mayor frecuencia después de los 60 años de edad.

 

Signos y síntomas

Una persona puede tener cáncer de pulmón en un estadío temprano, y no tener síntomas. Pero ante la aparición de cualquiera de estos, es fundamental acudir sin demora a la consulta:

  • Tos persistente o que empeora con el correr de los días
  • Tos con sangre o esputo (saliva o flema)
  • Dolor en el pecho o dificultad para respirar
  • Ronquera
  • Pérdida de peso o del apetito
  • Fatiga sin motivo o debilidad
  • Silbido en pecho
  • Bronquitis o neumonías recurrentes

 

Tratamientos

El tratamiento para el cáncer de pulmón dependerá del tipo de tumor y su estadío, es decir, cuánto se ha propagado la enfermedad en el cuerpo.

En algunos casos, puede requerirse una cirugía, sobre todo si el cáncer está limitado a uno solo de los pulmones o a los ganglios linfáticos cercanos. También es posible que se deba realizar quimio y radioterapia.

Actualmente, avanza la aplicación de inmunoterapias, que son tratamientos que impulsan o restauran las defensas del propio organismo para combatir el tumor.

También puede ser una buena opción ingresar a un ensayo clínico, es decir, a un estudio en el que se investiga la eficacia de nuevos tratamientos. En Córdoba, existen estudios en marcha al respecto, que se pueden consultar aquí.

Es importante recordar que, aun en estadíos avanzados de la enfermedad, siempre hay posibilidades de tratamiento, que aunque puedan no tener un objetivo curativo, pueden ofrecer mayor confort a la persona afectada.

 

Colaboró para esta nota: Dr. Alejandro Rubio.

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